
Compra de cartera
Si te ves algo apretado por las deudas y tienes dificultades para cumplir con tus obligaciones, te recomendamos la compra de cartera.
Pero, ¿qué es la compra de cartera y por qué debería considerar este método para aliviar las obligaciones adquiridas?
¿Qué es la compra de cartera?
La compra de cartera es una solución a los problemas de mora que tengan los usuarios de productos como tarjetas de crédito y todo tipo de crédito. Por lo general, son los bancos los que ofrecen esta alternativa y desde el punto de vista del negocio es una manera de atraer clientes nuevos.
Una explicación más detallada y profesional es la que hace Asobancaria (Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia):
“La compra de cartera ocurre cuando un banco le ofrece a un deudor unificar sus deudas actuales en otro préstamo consolidado con menores tasas de interés. El resultado que debe buscar el usuario es que el pago del nuevo préstamo consolidado sea menor a la suma de los otros créditos o que pueda pagar todos sus créditos más rápido”.
Para ello, los bancos suelen contactar a la persona y le ofrecen mejores condiciones en los productos en mora como mejores tasas de interés (más bajas) y un periodo más amplio.
Ahora bien, es importante recalcar que no hay que esperar a que un banco o un ente financiero nos ofrezca la compra de cartera, pues uno como cliente también puede solicitarlo y basta con dirigirse a la entidad con la que se quiere hacer el negocio y hacer las averiguaciones pertinentes.
En este caso, la recomendación y lo más lógico es solicitar la compra siempre y cuando las condiciones de la o de las deudas sean mejores a las actuales o no hay un desembolso de un excedente de dinero.
Pero ojo, por el simple hecho de que nos den una tasa de interés mucho menor quiere decir que sea un buen negocio. Por eso es importante revisar detalladamente las condiciones pues es posible que se incluyan cobros adicionales como seguros, costos por el estudio de crédito entre otras cosas.
También es fundamental leer los términos y cláusulas para tener la certeza de lo que nos están ofreciendo, pues cada entidad tiene sus propias políticas que pueden ser o no beneficiosas para los usuarios.
¿Qué pasa con la deuda?
Se suele creer que al someterse a la compra de cartera, la deuda desaparece, pero no es así. La deuda persiste pero ya no la vamos a tener con el banco A, sino que pasaremos a deberle al banco B.
Esto se da porque el banco B compra o salda la deuda que la persona tenga con el banco A y así convertirlo en cliente. De ahí que los bancos quieran persuadir a las personas con mejores tasas y condiciones.
Todo lo anterior implicaría tener en un solo lugar las deudas. Para entenderlo mejor veamos el siguiente ejemplo.
Supongamos que tienes una tarjeta Visa con el banco X, un crédito hipotecario con el banco Y y otra tarjeta de crédito American Express con el banco Z. La Visa tiene una tasa de interés anual del 30%, mientras que la American Express del 28% y el crédito 25%.
Cuando solicitas o te ofrecen la compra de cartera, el banco que contactaste o te contactó, pondrá al día esas deudas con los respectivos bancos para unificarlas. Así entonces solo le pagarás a dicha entidad que además de haber financiado las obligaciones te dejó una tasa de interés mucho más baja respecto a las que tenías.
¿Cuándo debería considerar la compra de cartera?
Como hemos visto este método está pensado para dar alivio a nuestro bolsillo a través de mejores condiciones en los productos financieros que tengamos.
Por esta razón, debemos considerar la idea de la compra de cartera cuando tengamos varias obligaciones repartidas con diferentes entidades financieras y esto esté afectando nuestro bolsillo.
También si vemos que las cuotas que estamos cancelando mensualmente tienen unos intereses demasiados altos, valdría la pena buscar otro banco que ofrezca tasas mucho más bajas.
Consideraciones antes de solicitar la compra de cartera
Son 4 puntos claves que debemos tener en cuenta a la hora de elegir o no la compra de cartera. Estas son:
Tasa de interés: es deseable que la tasa de interés ofrecida sea menor que la actual.
Plazo: como la idea es pagar una cuota menor, lo normal es que el plazo se extienda por lo que simplemente debemos elegir la opción que mejor se adapte a nuestras necesidades.
Monto de la cuota: como la idea es que el monto de la cuota baje debemos prestar atención y revisar los cambios que ésta pueda sufrir. Debemos ver si podemos hacerle frente y así asegurarnos el cumplimiento para mantener el historial crediticio.
Condiciones: ya lo mencionamos, cada entidad tiene sus condiciones y en el momento de la compra de cartera debemos revisar esas condiciones especiales para no incurrir en costos innecesarios.
Beneficios
Ya vimos que esta alternativa tiene sus beneficios como mejores condiciones, pero más allá de eso podemos considerar a la compra de cartera como un método para organizar nuestras finanzas y reducir el riesgo de incumplir con los pagos de las cuotas.
Como bien sabemos, uno de los principales factores que afecta nuestro puntaje crediticio es la mora, es decir el cumplimiento de los pagos de nuestros productos financieros en la fecha establecida.
Pues bien, la compra de cartera puede reducir ese riesgo de incumplimiento por las razones que hemos mencionado durante todo este artículo; cuotas más bajas y pagos a un solo banco.
Esto representa que al momento de solicitar un crédito tengamos mayor probabilidad de que nos aprueben el préstamo con unas condiciones mucho mejores que las que puede tener una persona con un puntaje menor.
Por otra parte, el aumento de liquidez mensual podría aumentar ya que estaríamos pagando tasas de interés más bajas, dejándonos un pequeño remanente que puede ser usado en otras cosas. Esto también puede permitirnos ahorrar ese dinero que sobró.